ADOPTAR UN ANIMAL NO CAMBIA EL MUNDO, PERO CAMBIA EL MUNDO DE ESE ANIMAL

domingo, 8 de junio de 2014

CADA PASEO UNA AVENTURA

¡¡HORA DEL PASEO. . . SIIII!!. Son los mejores momentos del día. Y si mi humana no trabaja y tenemos tiempo para una larga salida. . . . eso no tiene precio.

Todo el mundo sabe que los de mi especie percibimos enseguida cuándo se acerca ese momento. Es cierto que la mayoría de las veces es porque se suelen dar a la misma hora, y tenemos un reloj interno increíble. En mi caso, ayuda mucho el que mi humana se empiece a vestir con lo que ella llama "ropa de perro" y empieza a preparar cosas como si nos fuéramos a mudar: correa, pelota, chuches, bolsas, botellines de agua. . . 

Aunque me encanta salir, lo de andar por andar sin más no va conmigo. A mi me gusta que cada paseo se convierta en una aventura. Y en eso mi humana y yo somos expertas.
Como nos gusta ir por sitios poco transitados, nos metemos campo a través, por donde es más complicado y casi siempre está más embarrado. A mi me encanta porque todo se vuelve más interesante, aunque si nos acompaña mi humano adoptivo nos limitamos a dar paseítos como el resto de los mortales, porque dice que esos son caminos de cabras y que tenemos que ir por donde van las personas civilizadas. 

Pero cuando mi humana, mi hermana perruna Luka y yo nos vamos por el monte, me lo paso pipa olfateando los rastros de los conejos y persiguiendo a los que corren a toda prisa hacia los cados. Tengo que reconocer que yo no tengo la vitalidad de antes, pero Luka sí, cómo disfruta. . . y mi humana nos deja porque nunca alcanzamos ninguno.

Hemos vuelto a casa con más de un arañazo por las zarzas, rasponazos al resbalar por las grandes pendientes o de barro hasta las orejas, con más de un gorrión caído del nido o contando que hemos salvado algún erizo de morir atropellado, y aunque a mi humano adoptivo no le gusta mucho nuestra pasión por lo desconocido, él siempre está ahí, cuando volvemos como si de la guerra se tratase, con algún animalillo transquilado o con muchas ganas de contar alguna anécdota que nos ha ocurrido.

La verdad es que disfrutamos mucho las dos, bueno, las tres, desde que hace ya un tiempo comparto aventuras con Luka, pero esa historia la dejamos para otro día.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mis visitas. . . gracias

Tradúceme